Educación secundaria en Puerto Rico: currículo, programas y retos

La adolescencia es una etapa de transformaciones profundas, un puente entre la niñez y la vida adulta. En este periodo, la educación formal juega un papel fundamental no solo en la adquisición de conocimientos, sino en el desarrollo de habilidades para el trabajo, la universidad y la vida cívica. El sistema educativo debe ser capaz de acompañar a los jóvenes en este viaje. Este artículo analiza en profundidad la educación secundaria en Puerto Rico, explorando su estructura, el currículo que la define, los programas disponibles y los complejos desafíos que enfrenta en la actualidad.

El objetivo es ofrecer una visión completa que sirva de guía para docentes, administradores y cualquier persona interesada en comprender las particularidades de la educación para adolescentes en la isla. Desde su organización en niveles intermedio y superior hasta el impacto de factores socioeconómicos y naturales, cada elemento contribuye a formar el panorama educativo actual.

Qué vas a encontrar en este artículo

Organización de la educación secundaria en Puerto Rico

El sistema educativo puertorriqueño, gestionado principalmente por el Departamento de Educación de Puerto Rico (DEPR), estructura la educación secundaria en dos niveles bien definidos, que siguen al nivel primario (elemental) y preceden a la educación superior.

Escuela intermedia (7.º a 9.º grado)

La escuela intermedia abarca los grados séptimo, octavo y noveno. Generalmente, los estudiantes ingresan a este nivel con edades comprendidas entre los 12 y 14 años. El propósito de esta etapa es consolidar los conocimientos adquiridos en la primaria y comenzar a introducir conceptos más abstractos y especializados. Es una fase de transición crucial donde los estudiantes desarrollan mayor autonomía y empiezan a explorar sus intereses académicos y personales. El currículo se vuelve más diversificado, y se espera que los alumnos asuman una mayor responsabilidad en su proceso de aprendizaje.

Escuela superior / high school (10.º a 12.º grado)

La escuela superior, comúnmente conocida por su término en inglés high school, comprende los grados décimo, undécimo y duodécimo. Los estudiantes suelen cursar este nivel entre los 15 y 18 años. Esta es la fase final de la educación obligatoria en Puerto Rico. Su objetivo principal es preparar a los jóvenes para dos posibles caminos: continuar estudios universitarios o integrarse al mundo laboral. Por ello, el currículo se intensifica en complejidad y se ofrecen distintas rutas académicas y vocacionales para alinear las trayectorias escolares con las aspiraciones de los estudiantes.

La finalización exitosa de la escuela superior culmina con la obtención del diploma de cuarto año, requisito indispensable para acceder a la universidad o a la mayoría de las ofertas de empleo cualificado.

cuáles son los retos de las escuelas secundarias en Puerto Rico

Currículo de la educación secundaria

El currículum escolar en el nivel secundario está diseñado para proporcionar una base sólida de conocimientos generales, al tiempo que permite cierta especialización. Aunque existen variaciones entre las escuelas, especialmente entre el sector público y el privado, el marco curricular básico es consistente.

Materias obligatorias y enfoque general

El DEPR establece un conjunto de materias fundamentales que todos los estudiantes deben cursar. Estas incluyen:

  • Español: Enfocado en la literatura, gramática, redacción y comunicación oral. Se busca el dominio del vernáculo.
  • Inglés: Como segundo idioma oficial, su enseñanza es obligatoria. El objetivo es desarrollar competencias bilingües, aunque el nivel de dominio alcanzado varía significativamente.
  • Matemáticas: Abarca desde el álgebra y la geometría en la escuela intermedia hasta la precálculo y cálculo en la escuela superior.
  • Ciencias: Incluye ciencias físicas, biología, química y física, con un enfoque progresivo en la complejidad de los conceptos.
  • Estudios Sociales: Cubre la historia de Puerto Rico, Estados Unidos y el mundo, además de geografía, economía y civismo.
  • Educación Física: Orientada a promover la salud y el bienestar a través de la actividad física.

Además de estas materias troncales, se suelen ofrecer cursos electivos en áreas como bellas artes, música, tecnología y lenguajes extranjeros.

El bilingüismo: una meta compleja

Puerto Rico tiene dos idiomas oficiales, español e inglés. El sistema educativo aspira a formar estudiantes bilingües, pero la realidad es compleja. En la mayoría de las escuelas públicas, el español es el idioma de instrucción principal, y el inglés se enseña como una asignatura. El resultado es que muchos graduados no alcanzan una fluidez funcional en inglés. Este es uno de los retos persistentes del sistema, ya que el dominio del inglés es crucial para la competitividad en la educación superior y el mercado laboral global. Algunas escuelas, especialmente en el sector privado, ofrecen programas de inmersión o utilizan el inglés como principal vehículo de enseñanza, creando una brecha en las competencias lingüísticas.

Diferencias entre escuelas públicas y privadas

Las desigualdades entre el sistema público y el privado son marcadas en la educación secundaria en Puerto Rico. Las escuelas privadas, que atienden a un porcentaje menor pero significativo de la población estudiantil, suelen contar con más recursos, clases más pequeñas y una mayor flexibilidad curricular. A menudo, ofrecen programas especializados, como el Bachillerato Internacional (IB), programas bilingües avanzados o un fuerte enfoque en la preparación para el ingreso a universidades de Estados Unidos.

Por otro lado, el sistema público enfrenta desafíos de financiación, infraestructura y escasez de personal, lo que impacta directamente en la calidad de la enseñanza y en la variedad de la oferta educativa. Esta disparidad contribuye a la equidad educativa como uno de los problemas centrales.

Evaluaciones estandarizadas en este nivel

A lo largo de la secundaria, los estudiantes participan en diversas evaluaciones estandarizadas para medir su progreso y aptitudes.

  • Pruebas META-PR (Medición y Evaluación para la Transformación Académica de Puerto Rico): Son las pruebas estandarizadas administradas por el DEPR para medir el dominio de los estudiantes en materias como español, matemáticas, inglés y ciencias. Sus resultados se utilizan para evaluar el rendimiento de estudiantes, escuelas y distritos.
  • Pruebas de Aptitud Académica (PAA): Administradas por el College Board, son un requisito fundamental para la admisión en la mayoría de las universidades de Puerto Rico. Miden el razonamiento verbal y matemático.
  • SAT (Scholastic Assessment Test): También del College Board, es requerido por muchas universidades en Estados Unidos y algunas en Puerto Rico. Evalúa habilidades en lectura, escritura y matemáticas.

Estas pruebas actúan como una forma de evaluación sumativa que tiene un peso significativo en el futuro académico de los estudiantes.

Programas y modalidades en la secundaria

Más allá del programa académico general, el sistema de educación secundaria en Puerto Rico ofrece diversas modalidades para atender los diferentes intereses y necesidades de los estudiantes.

Escuelas vocacionales y técnicas

Las escuelas vocacionales y técnicas están diseñadas para preparar a los estudiantes para el mundo laboral. Ofrecen formación especializada en oficios de alta demanda como enfermería práctica, artes culinarias, mecánica automotriz, electricidad, cosmetología y programación de computadoras. Estos programas combinan el currículo académico regular con una formación práctica intensiva. Representan una alternativa valiosa para aquellos jóvenes que prefieren una ruta de aprendizaje aplicado y desean incorporarse rápidamente al mercado de trabajo tras graduarse, aunque también pueden servir como base para estudios técnicos superiores.

Programas artísticos y especializados

Existen escuelas especializadas que se centran en el desarrollo de talentos específicos. Las Escuelas Libres de Música, por ejemplo, ofrecen una formación musical rigurosa en paralelo a las materias académicas. Otras escuelas se especializan en artes visuales, teatro, danza o deportes. Estos centros permiten a los estudiantes con vocaciones claras profundizar en sus pasiones mientras completan su educación obligatoria.

Educación bilingüe e internacional

Como se mencionó, principalmente en el sector privado, existen instituciones con un fuerte enfoque bilingüe o internacional. Estas escuelas suelen seguir currículos estadounidenses o programas como el Bachillerato Internacional (IB), preparando a sus estudiantes para la movilidad internacional y el acceso a universidades en el extranjero. Suelen tener un profesorado diverso y un alumnado proveniente de distintos contextos culturales.

Escuelas charter y programas alternativos

En los últimos años, han surgido en Puerto Rico las escuelas públicas alianza, también conocidas como charter schools. Estas escuelas son operadas por entidades no gubernamentales pero financiadas con fondos públicos, lo que les otorga mayor autonomía en su gestión pedagógica y administrativa. A menudo, se enfocan en metodologías activas o atienden a poblaciones estudiantiles con necesidades específicas. Junto a ellas, existen programas de educación alternativa diseñados para estudiantes en riesgo de deserción, ofreciendo horarios flexibles y un enfoque pedagógico adaptado a sus circunstancias.

educación secundaria en Puerto Rico

Calidad educativa en la secundaria puertorriqueña

Analizar la calidad de la educación secundaria en Puerto Rico requiere observar diversos indicadores, los cuales revelan un panorama de luces y sombras.

Tasas de graduación y deserción

La deserción escolar es uno de los problemas más graves del sistema. Aunque las tasas de graduación han mostrado fluctuaciones, persiste una preocupación por el número de jóvenes que abandonan la escuela antes de obtener su diploma. Las causas son multifactoriales: dificultades económicas, falta de motivación, problemas familiares, y un currículo que no siempre conecta con los intereses de los estudiantes. El abandono escolar no solo limita las oportunidades individuales, sino que tiene un costo social y económico a largo plazo para la isla.

Desempeño en pruebas nacionales y federales

Los resultados de los estudiantes puertorriqueños en pruebas estandarizadas, tanto locales (META-PR) como nacionales de EE. UU. (NAEP, conocidas como “La libreta de calificaciones de la nación”), han mostrado consistentemente un rendimiento por debajo del promedio. Estas puntuaciones reflejan brechas significativas en áreas clave como matemáticas y lectura, especialmente en comparación con otros distritos escolares de Estados Unidos. Estos resultados encienden alarmas sobre la efectividad de las estrategias de comprensión lectora y matemáticas que se implementan en el aula.

Brechas socioeconómicas y regionales

La desigualdad es un factor determinante en la calidad educativa. Existe una brecha profunda entre los resultados de las escuelas urbanas y rurales, y entre las escuelas públicas y privadas. Los estudiantes de familias con mayores ingresos tienen acceso a mejores recursos, tutorías y una educación de mayor calidad, perpetuando un ciclo de desventaja. La pobreza infantil y el aprendizaje escolar están directamente correlacionados, y en Puerto Rico esta relación es muy evidente.

Retos de infraestructura y acceso a recursos

Muchas escuelas públicas sufren de una infraestructura deteriorada. Problemas como la falta de aire acondicionado, laboratorios obsoletos, bibliotecas con pocos recursos y acceso limitado a la tecnología son comunes. Los desastres naturales, como el huracán María en 2017 y los terremotos de 2020, agravaron esta situación, destruyendo o dañando cientos de planteles escolares y dejando al descubierto la fragilidad del sistema.

El rol de los docentes en secundaria

Los docentes son el pilar fundamental del sistema educativo, pero enfrentan condiciones laborales y profesionales complejas, especialmente en el nivel secundario.

Requisitos de certificación y formación

Para enseñar en el sistema público de Puerto Rico, los docentes deben poseer un bachillerato en educación y una certificación (licencia) expedida por el DEPR en su área de especialización. La formación continua es un requisito para mantener la licencia activa. Sin embargo, la calidad y relevancia de los programas de desarrollo profesional son a menudo un punto de debate. Las competencias docentes necesarias para el siglo XXI requieren una actualización constante que no siempre es fácil de obtener.

Retos en la enseñanza de adolescentes

Trabajar con adolescentes presenta desafíos únicos. Además de dominar su materia, el rol del docente en secundaria implica ser un mentor, un guía y un mediador de conflictos entre alumnos. Los docentes deben manejar problemas de comportamiento, motivar a estudiantes desinteresados y apoyar el desarrollo socioemocional de los jóvenes. Esto requiere una sólida formación en pedagogía y psicología del adolescente, así como una gran dosis de paciencia y vocación.

Problemas de salarios, migración y carga laboral

Los salarios de los maestros en Puerto Rico han sido históricamente bajos en comparación con los de Estados Unidos, lo que ha provocado una fuga constante de talento hacia el continente. Muchos docentes emigran en busca de mejores condiciones laborales y salariales. Quienes se quedan a menudo enfrentan una carga laboral pesada, con grupos numerosos y una gran cantidad de tareas administrativas. El síndrome de burnout docente es una realidad palpable que afecta la calidad de la enseñanza y el bienestar del profesorado.

Principales retos de la educación secundaria en Puerto Rico

El sistema educativo secundario de la isla se enfrenta a una confluencia de desafíos estructurales y coyunturales que condicionan su presente y futuro.

Deserción escolar y migración juvenil

La combinación de una crisis económica prolongada y los desastres naturales ha impulsado la emigración de miles de familias. Esto no solo reduce la matrícula escolar, sino que también provoca una “fuga de cerebros” entre los jóvenes más talentosos que buscan oportunidades fuera de la isla. La deserción escolar, como ya se mencionó, agrava este problema, dejando a una parte de la juventud sin las cualificaciones necesarias para prosperar.

Impacto de la crisis económica, huracanes y pandemia

La última década ha sido particularmente dura. La crisis de la deuda pública llevó a severos recortes en el presupuesto de educación. El huracán María en 2017 y los terremotos de 2020 causaron cierres masivos de escuelas y una interrupción prolongada del aprendizaje. Más recientemente, la pandemia de COVID-19 forzó una transición abrupta a la educación a distancia, exponiendo las profundas desigualdades en el acceso a la tecnología. Estos eventos han generado un significativo rezago educativo que tomará años superar.

Desigualdades entre escuelas públicas y privadas

La brecha entre la educación pública y la privada sigue siendo uno de los mayores obstáculos para un desarrollo equitativo. Mientras que las escuelas privadas a menudo actúan como trampolines hacia el éxito, el sistema público lucha por garantizar una educación de calidad para la mayoría. Esta dualidad fragmenta la sociedad y limita la movilidad social a través de la educación.

Brecha digital y acceso desigual a tecnología

La pandemia evidenció la brecha digital existente. Muchos estudiantes de bajos recursos no tenían acceso a computadoras o a una conexión a internet estable, lo que les impidió participar plenamente en la educación en línea. Aunque se han hecho esfuerzos para distribuir dispositivos, el acceso desigual a la tecnología sigue siendo una barrera importante para el aprendizaje en el siglo XXI.

Retos para preparar a los estudiantes para la universidad y el trabajo

Finalmente, un reto central es si el sistema actual está preparando adecuadamente a los jóvenes para los desafíos del futuro. Las universidades reportan que muchos estudiantes de nuevo ingreso necesitan cursos de nivelación en áreas básicas como matemáticas y español. Al mismo tiempo, los empleadores señalan la falta de habilidades blandas (comunicación, trabajo en equipo, pensamiento crítico) y técnicas en los graduados de secundaria. Lograr una mejor alineación entre los contenidos curriculares de la secundaria y las demandas de la educación superior y el mercado laboral es una tarea pendiente y urgente.

Oportunidades y perspectivas de mejora

A pesar del sombrío panorama de desafíos, existen también importantes oportunidades y vías de transformación para la educación secundaria en Puerto Rico. La crisis puede ser un catalizador para el cambio y la innovación.

Reformas curriculares en discusión

Existe un creciente consenso sobre la necesidad de modernizar el currículo. Las discusiones actuales se centran en transitar hacia un modelo de educación por competencias, que ponga menos énfasis en la memorización y más en el desarrollo de habilidades prácticas y el pensamiento crítico. Una reforma curricular exitosa debería ofrecer mayor flexibilidad, integrar la tecnología de manera transversal y conectar los contenidos con la realidad y la cultura puertorriqueña, haciendo el aprendizaje significativo para los estudiantes.

Innovaciones pedagógicas y programas de apoyo comunitario

La adversidad ha impulsado a muchos educadores y comunidades a innovar. Están surgiendo iniciativas que implementan metodologías como el aprendizaje basado en proyectos (ABP) y el aprendizaje-servicio, que conectan la escuela con las necesidades de su entorno. Asimismo, la colaboración con organizaciones sin fines de lucro, universidades y empresas privadas está creando redes de apoyo que ofrecen tutorías, programas extracurriculares y oportunidades de mentoría, fortaleciendo el rol de la escuela como institución social.

Potencial de la educación técnica y vocacional

Fortalecer la educación técnica y vocacional es una de las oportunidades más claras para el desarrollo económico de la isla. Un sistema robusto de formación profesional puede reducir la deserción escolar al ofrecer a los jóvenes una ruta educativa relevante y con una salida laboral clara. Invertir en la modernización de los programas vocacionales, alineándolos con las industrias de mayor crecimiento en Puerto Rico (como la tecnología, las energías renovables y el turismo), puede transformar a las escuelas secundarias en motores de desarrollo.

Iniciativas para reducir la deserción y mejorar la retención escolar

Se están explorando diversas estrategias para combatir la deserción. Estas incluyen sistemas de alerta temprana para identificar a estudiantes en riesgo, programas de tutoría entre pares, mayor apoyo psicológico y socioemocional, y una mayor participación familiar en el proceso educativo. Crear un clima escolar positivo y seguro, donde los estudiantes se sientan valorados y apoyados, es fundamental para garantizar su permanencia en el sistema.

La educación secundaria en Puerto Rico se encuentra en una encrucijada. Es un sistema que refleja las complejidades y contradicciones de la isla: un marco legal y curricular sólido que coexiste con profundas desigualdades, una comunidad docente dedicada que lucha contra condiciones adversas, y una juventud resiliente que enfrenta un futuro incierto.

Los retos son innegables y monumentales, desde la recuperación post-desastres hasta la superación de brechas socioeconómicas históricas. Sin embargo, en medio de las dificultades, surgen oportunidades para repensar y reconstruir. La transformación de la educación secundaria es una pieza clave no solo para el futuro de cada estudiante, sino para el futuro de Puerto Rico en su conjunto. Analizar este nivel es el primer paso para entender con mayor profundidad temas vinculados como la educación superior, las causas de la deserción escolar y el potencial de los programas vocacionales para revitalizar la economía de la isla.

Recursos para el docente de secundaria en Puerto Rico

Los educadores son agentes de cambio. Aquí se presentan algunos recursos y estrategias para fortalecer su práctica pedagógica en el contexto puertorriqueño.

  1. Planificación y Currículo:

    • Departamento de Educación de PR: Explorar el portal oficial del DEPR para acceder a los marcos curriculares, mapas curriculares y cartas circulares vigentes. Es la fuente primaria para la alineación curricular.
    • Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA): Investigar los principios del Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA) para crear una planificación didáctica más inclusiva que atienda la diversidad de estudiantes en el aula.
    • Conexión cultural: Integrar en las lecciones autores, científicos, artistas e historiadores puertorriqueños. Utilizar problemas y ejemplos locales para contextualizar los conceptos y hacerlos más relevantes para los estudiantes.
  2. Metodologías y Estrategias de Evaluación:

    • Metodologías activas: Implementar estrategias como el aprendizaje cooperativo o el flipped classroom para fomentar la participación y el protagonismo del estudiante.
    • Evaluación formativa: Utilizar rúbricas claras, portafolios y proyectos para realizar una evaluación formativa continua que ofrezca retroalimentación efectiva y guíe el aprendizaje, en lugar de solo medirlo al final.
    • Educación socioemocional: Integrar actividades de educación emocional para ayudar a los estudiantes a manejar el estrés y desarrollar resiliencia, algo crucial en el contexto post-desastres y pandemia.
  3. Desarrollo Profesional:

    • Organizaciones profesionales: Unirse a asociaciones de docentes en su materia (ej. Asociación de Maestros de Puerto Rico, organizaciones de educadores de ciencias o matemáticas) para acceder a talleres, redes de apoyo y recursos.
    • Plataformas en línea: Utilizar plataformas como Coursera, edX o Google for Education para acceder a cursos gratuitos sobre herramientas TIC, nuevas pedagogías y manejo del aula.
    • Comunidades de práctica: Crear o unirse a grupos de docentes dentro de la misma escuela o distrito para compartir experiencias, estrategias exitosas y resolver problemas de forma colaborativa.

Glosario

  • DEPR: Siglas del Departamento de Educación de Puerto Rico, la agencia gubernamental responsable de administrar el sistema de educación pública en la isla.
  • Escuela Alianza (Charter School): Escuela pública financiada por el estado pero operada por una entidad independiente, lo que le otorga mayor autonomía pedagógica y administrativa.
  • META-PR: Siglas de Medición y Evaluación para la Transformación Académica de Puerto Rico. Son las pruebas estandarizadas oficiales del sistema público para medir el progreso académico.
  • PAA: Siglas de Prueba de Aptitud Académica. Examen estandarizado del College Board utilizado por la mayoría de las universidades en Puerto Rico como criterio de admisión.
  • Bachillerato Internacional (IB): Programa educativo riguroso y reconocido internacionalmente, ofrecido por algunas escuelas secundarias (mayoritariamente privadas) que prepara a los estudiantes para la educación superior a nivel global.

Preguntas Frecuentes (FAQ)

1. ¿Es obligatoria la educación secundaria en Puerto Rico?
Sí, la educación es obligatoria en Puerto Rico hasta completar el duodécimo grado o hasta que el estudiante cumpla los 18 años.

2. ¿Cuáles son las principales diferencias entre las escuelas públicas y privadas?
Las principales diferencias radican en los recursos, el tamaño de las clases y la flexibilidad curricular. Las escuelas privadas suelen tener más financiamiento, grupos más pequeños y ofrecen programas especializados como el bilingüismo intensivo o el Bachillerato Internacional. Las escuelas públicas atienden a la gran mayoría de la población y enfrentan mayores desafíos de infraestructura y presupuesto.

3. ¿Qué se necesita para ser maestro de secundaria en Puerto Rico?
Se requiere un título de bachillerato en educación en una materia específica y una licencia de maestro vigente expedida por el Departamento de Educación de Puerto Rico.

4. ¿Qué son las pruebas PAA y SAT?
Son exámenes estandarizados de admisión universitaria. La PAA (Prueba de Aptitud Académica) es utilizada por la mayoría de las universidades en Puerto Rico. El SAT (Scholastic Assessment Test) es requerido principalmente por universidades en Estados Unidos, aunque algunas en la isla también lo aceptan.

5. ¿Qué son las escuelas vocacionales?
Son escuelas secundarias que ofrecen, además del currículo académico regular, formación técnica y práctica en oficios específicos como artes culinarias, mecánica, enfermería, entre otros, preparando a los estudiantes para una inserción directa en el mercado laboral.

Bibliografía

  • Alvarez, L. & Ruiz, V. (2019). Repensar la educación en Puerto Rico: Desafíos y alternativas en tiempos de crisis. Ediciones Callejón.
  • Benítez, J. (2017). Una mirada a la historia de la educación en Puerto Rico. Editorial de la Universidad de Puerto Rico.
  • Borràs, R. (2020). Pedagogía para tiempos de incertidumbre: Cómo educar después de la pandemia. Editorial Graó.
  • Carbonell, J. (2015). Pedagogías del siglo XXI: Alternativas para la innovación educativa. Ediciones Octaedro.
  • Díaz-Soto, L. (2012). La educación bilingüe en el contexto de Puerto Rico: Políticas y prácticas. Publicaciones Gaviota.
  • Fullan, M. (2018). El cambio educativo: Una guía para directores y docentes. Narcea Ediciones.
  • García, N. & Negrón, M. (2021). Desigualdad y sistema educativo en el Caribe: Un estudio comparado. FLACSO.
  • Ginorio, A. B. & Dávila, A. (2016). La escuela y la comunidad: Retos de la participación familiar en Puerto Rico. SM Editores.
  • López, R. (2018). El impacto de la crisis fiscal en el sistema educativo puertorriqueño. Centro de Estudios Puertorriqueños.
  • Marchesi, Á. (2019). Controversias en la educación: 25 años después. Alianza Editorial.
  • Morin, E. (2001). Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. Ediciones Paidós.
  • Nieto, S. (2013). Finding Joy in Teaching Students of Diverse Backgrounds: Culturally Responsive and Socially Just Practices in U.S. Classrooms. Heinemann. (Aunque en inglés, es una referencia clave y muchas de sus ideas están traducidas y discutidas en contextos hispanos).
  • Rivera, A. (2022). Juventud y migración en el Puerto Rico contemporáneo: La fuga de cerebros y sus consecuencias. Ediciones Huracán.
  • Santos, M. A. (2014). La evaluación como aprendizaje: Cuando la flecha impacta en la diana. Narcea Ediciones.
  • Torres, C. A. (2017). Educación y neoliberalismo: Ensayos de política y sociología de la educación para América Latina. CLACSO.

Dejá un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.